Joan Laporta vuelve a encender la maquinaria. El presidente del Barcelona, decidido a sacudir el mercado una vez más, ha puesto sus ojos en Dušan Vlahović. El delantero de la Juventus vuelve a escena. Y lo hace en un momento especialmente delicado para el Barça, que sigue atrapado entre el Fair Play financiero y la necesidad —cada vez más evidente— de encontrar un ‘9’ para el futuro inmediato.
Vlahović encaja en ese perfil. Goles, presencia, carácter. Pero también un problema mayúsculo: su sueldo. El serbio percibe 12 millones netos más bonus. Una cifra inasumible para un club que continúa respirando con la bombona de oxígeno al límite. Aun así, Laporta está dispuesto a forzar la máquina.

Un ‘descarte’ del Real Madrid que vuelve al mercado
La operación tiene otra lectura interesante. Vlahović fue ofrecido al Real Madrid el pasado verano. El club blanco lo valoró. Gustaba en algunos despachos, más por proyección que por encaje inmediato. Pero el escenario cambió de golpe: el rendimiento de Gonzalo en el Mundial de Clubes y la explosión definitiva de Mbappé como el mejor jugador del mundo cerraron la puerta. No había hueco para un nueve más. La decisión fue clara: “no” definitivo.
Ese rechazo deja ahora a Vlahović en manos de un Barça que busca reinventarse. Y Laporta, que conoce bien este tipo de oportunidades mediáticas, lo ve como una carta útil. Para el equipo y para su narrativa interna. El problema es que cuesta dinero. Mucho dinero.

Laporta vuelve a jugársela con un fichaje de alto riesgo
En el Barça ya asumen que fichar al serbio implicaría un nuevo esfuerzo económico. Quizá otro préstamo. Quizá comprometer más ingresos futuros. Una fórmula que la directiva ya ha usado en demasiadas ocasiones. Pero Laporta insiste: necesita un golpe sobre la mesa. Y quiere que ese golpe sea un delantero capaz de llenar portadas y abrir debates.
Mientras tanto, Vlahović vive un presente extraño en Turín. Spalletti le ha dado protagonismo. Le ha devuelto minutos, sensaciones y confianza. El serbio responde. Marca. Compite. Se reivindica. Pero su situación contractual sigue en el aire, y desde hace meses la Juventus escucha ofertas.
En Barcelona, el debate ya está encendido. ¿Tiene sentido fichar a un jugador así en plena crisis económica? ¿Se justifica asumir otro riesgo financiero por un delantero que el Real Madrid descartó sin dudar?
Laporta cree que sí. Para él, Vlahović puede ser la apuesta que cambie el relato. Aunque eso signifique hipotecar un poco más el futuro. Otra vez.