El vínculo entre Marcelo Vieira y el Fluminense ya es historia. El club brasileño ha anunciado en la tarde de este sábado la rescisión de contrato de mutuo acuerdo con el lateral izquierdo, ex jugador del Real Madrid, en una decisión que se produce tras un incidente con el entrenador Mano Menezes durante el partido contra Gremio, que finalizó en empate a dos.
A sus 36 años, Marcelo Vieira había tenido un regreso triunfal al club tras su exitosa etapa como madridista. El carioca se encontraba listo para ingresar al campo en el minuto 90. Sin embargo, un intercambio de palabras con su preparador llevó al técnico a cambiar de decisión y llamar a otro jugador, Kennedy. Visiblemente molesto, el jugador regresó al banquillo.
LA RAZÓN DEL CABREO DE MANO MENEZES
"Iba a poner a Marcelo, pero hubo una cosa que no me gustó y cambié de opinión. Entonces puse a John Kennedy", afirmó el técnico de Fluminense en la rueda de prensa tras el partido.

Marcelo Vieira, que había sido homenajeado en septiembre, se enfrenta ahora a una etapa incierta en su carrera, quedando fuera de la posibilidad de participar en el Mundial de Clubes, donde hubiera tenido la oportunidad de medirse nuevamente contra el Real Madrid. No sabemos qué le deparará el futuro al carioca, que incluso podría pensar en una retirada tras lo sucedido.
EL COMUNICADO DE FLUMINENSE
El comunicado oficial de Fluminense destaca que, a pesar de la ruptura, los lazos institucionales y afectivos entre el club y Marcelo Vieira se mantienen, mencionando que su nombre fue inmortalizado recientemente en el estadio de entrenamiento Xerém.
El futbolista podría seguir trabajando en el futuro en algún puesto ligado al club, pero por ahora parece que ambos se darán un tiempo tras lo sucedido. Un regreso que parecía perfecto y que ha finalizado de la manera más amarga posible.
