El partido pasado contra el Espanyol por parte del Real Madrid fue una verdadera vergüenza por lo que se vivió a nivel arbitral. No solamente se trató de una designación simplemente bochornosa, sino de una toma de decisiones sorprendente. Incluso varias figuras en el deporte internacional se han pronunciado con respecto a esta situación.
Uno de ellos ha sido Rafael Nadal, quien ha sido preguntado acerca de esta acción que pudo ser sancionada con tarjeta roja. "No he visto la carta del Real Madrid. La entrada a Mbappé me ha parecido demasiado dura. Si me preguntas si creo que era roja, para mí era magenta". Estas fueron las palabras del tenista español, el cual está bastante confuso con todo lo que se ha formado desde ese momento.
Desde su punto de vista, no podría terminar de interpretar cuál debería ser el verdadero color de esa tarjeta al no estar 100% relacionado con el fútbol. No obstante, está casi tan seguro de que es una expulsión clara que ha decidido dejarlo muy evidente en sus palabras.
Hasta Nadal lo sabe
El tenista nunca se ha visto ajeno al fútbol a niveles generales y, de hecho, es un gran aficionado del Real Madrid. En esta ocasión, a pesar de que sí pudo ver la acción que casi pudo propiciar una lesión a Mbappé, no se ha querido mojar con una respuesta clara.
Sin embargo, lo evidente de sus palabras expresa que lo ha visto más cerca de la expulsión que de permanecer en el campo para el jugador. La decisión del árbitro central pudo haber sido perfectamente corregida por el VAR, que decidió no hacerse presente.
No obstante, a pesar de que para muchos esto es una acción evidente para sancionar con una tarjeta roja, hay muchos que defienden lo contrario. Obviamente, se trata de antimadridistas y, sobre todo, culés que no quieren ver la realidad de las cosas. Además, gracias a este terrible error es que pueden seguir compitiendo por esta liga.
No puede seguir así
La situación ha escalado tanto que hasta el Real Madrid no pudo más y emitió una carta con duras críticas y quejas hacia la Federación. Un momento el cual, de no cambiar pronto, podría tener consecuencias graves tanto para el equipo blanco como para los líderes de la Federación.