La gestión de Florentino Pérez con el Real Madrid es una de las más exitosas e impecables que ha habido en la historia del fútbol tanto moderno como antiguo, compitiendo con otro grande como Don Santiago Bernabéu en quién ha sido el mejor para el Real Madrid.
No obstante, en su contraparte, el Fútbol Club Barcelona, ha tenido presidentes completamente deficientes en los últimos años y con Joan Laporta, a quién muchos de los aficionados idolatran, no ha sido la excepción a la regla, con una gestión que, sin los constantes disfraces que tienda a ponerle, ha sido cuanto menos criticable.
Bajo este criterio, una vez más se demuestra la diferencia entre la mentalidad del Real Madrid y Florentino quien tiene muy clara la visión del club a través de las remodelaciones de su estadio y que, encima, será mucho más rentable que el del Barcelona que podría, incluso, provocar su ruina.
El Bernabéu contra el Camp Nou
En balances de costos no hay color entre ambos proyectos, pues el nuevo Santiago Bernabéu (890 millones) es un estadio que costará menos en su construcción de lo que costará el nuevo Camp Nou (1.100 millones), situación que también deja claro que la gestión económica está mejor ejecutada.
Además, la opción de que el nuevo Bernabéu pueda ser un centro de eventos y convenciones en cualquier época del año, lo vuelve uno de los proyectos más redituables del mundo futbolístico actualmente, donde podrán ingresar grandes sumas de dinero solamente en eventos externos al fútbol.
Caso contrario con el nuevo Camp Nou que, a pesar de que sí que albergará eventos extradeportivos; estos sólo podrán llevarse a cabo en periodos de pretemporada, pues no cuentan con el mecanismo de césped retráctil del estadio merengue, lo que imposibilita la opción de usar el campo a libertad.
Entre estos puntos y muchos otros detalles, Florentino vuelve a dar una cátedra a su eterno rival de cómo afrontar un proyecto de futuro y no solamente de presente. Las cosas como son.