El periodista José Félix Díaz encendió las redes tras su última intervención en el canal de Twitch de Rubén Martín, donde dejó una revelación que ha dado mucho que hablar en el entorno blanco. “¿Te acuerdas que en verano el Madrid recibió una oferta por un jugador y no se sentó a negociar? Ese jugador era Rodrygo”, confesó el periodista, habitual colaborador en programas deportivos.
Según Díaz, el Bayern de Múnich fue el club que se lanzó a por el brasileño. Los alemanes habrían ofrecido 70 millones de euros por el delantero, pero el Real Madrid ni siquiera se sentó a escuchar. “La duda es a qué obedece esa negativa a hablar con el Bayern”, apuntó. “Porque Rodrygo no está teniendo un papel fundamental. Puede que esa negativa fuese por petición del propio jugador o por interés del club para decirle a Vinicius: ‘Oye, tienes competencia directa’”.
El Bayern quiso mover ficha
Fuentes cercanas a la operación aseguran que el conjunto bávaro confió el acercamiento a un intermediario de confianza. El objetivo era tantear la disposición del Madrid y conocer el precio real del jugador. Pero desde la entidad blanca la respuesta fue tajante: Rodrygo no se vende.
Esa postura, firme desde el inicio, sorprendió incluso dentro del mercado, ya que el brasileño atraviesa uno de sus momentos más discretos desde que llegó al Bernabéu. En los últimos encuentros apenas ha tenido minutos y su peso en el once se ha reducido considerablemente.
Dudas sobre su rol y futuro inmediato
El propio José Félix Díaz dejó abierta una reflexión: ¿confianza real o movimiento estratégico? El periodista insinuó que el club podría haber rechazado la oferta no solo por fe en el jugador, sino también para enviar un mensaje a Vinicius. Una forma de recordarle que su sitio en la izquierda no es intocable.
Rodrygo, por su parte, sigue trabajando en silencio. Suma dos titularidades en ocho partidos y algo más de 120 minutos en Liga, cifras bajas para un jugador de su nivel. Aun así, en Valdebebas hay confianza total en que recupere su mejor versión.
El Bayern sigue observando de lejos, pero el Real Madrid, al menos por ahora, tiene claro su mensaje: Rodrygo no está en venta, ni por 70 millones ni por nada.