Cuando parecía que los candidatos para reforzar el eje defensivo blanco eran jóvenes como Konaté o Guéhi, ha irrumpido desde la Premier un nombre menos sonado, pero con carácter: Micky Van de Ven. El central neerlandés de 24 años, flamante futbolista del Tottenham, ha empezado a aparecer en las charlas de los despachos del Bernabéu con más fuerza de lo habitual.
Lo que convence del jugador es lo evidente: control al espacio, explosión al sprint y contundencia aérea. No es solo un muro atrás: también se suma arriba en acciones a balón parado. Quienes le han visto frente al PSG en la final de la Supercopa de Europa saben bien de lo que hablo: no es flor de un día.
Procedente de Wolfsburgo, el Tottenham apostó fuerte en 2023 con una inversión de 40 millones de euros para traerle. Hasta entonces, era un proyecto con margen; ahora es una realidad que despega temporada tras temporada en la Premier. No solo tolera la exigencia; la responde con goles en jugadas a balón parado, velocidad, anticipación, y una calma sorprendente para su juventud.

Esa mezcla le hace destacar entre los centrales de moda. En Inglaterra ya es centro de conversación: pundits, ojeadores y aficionados han empezado a mencionarlo cuando se habla de potenciales fichajes de altura. Y ahí el Madrid no está ausente.
No solo el Madrid sueña con Van de Ven
Pero cuidado: este no es un romance en solitario. El Liverpool, ese gigante que no descansa en su búsqueda de talento, también ha movido ficha. Según Football FanCast, ha mostrado interés explícito. Klopp, siempre a la caza de piezas que duren y refuercen el futuro, ve en Van de Ven un complemento ideal para su zaga a medio plazo.
El hándicap, como en casi cualquier operación de nivel top, es el precio. No es un secreto que en Inglaterra los valores se inflan: en Transfermarkt aparece con una cotización de 55 millones, aunque el Tottenham podría negociar aún más alto. No venderán barato a uno de sus pilares emergentes.

El Madrid observa con cautela
Desde Valdebebas miran con prudencia. Porque reforzar la defensa es prioridad, pero tampoco quieren precipitarse. Si algo aprendió este club es que una mala elección en la retaguardia puede doler a largo plazo.
Van de Ven, con su paso firme y silencioso, es la sorpresa que podría convertirse en acierto mayúsculo. El Madrid, siempre atento, ahora ya sabe que hay un tapado que no suena fuerte… pero amenaza con resonar muy alto.