El Real Madrid, líder al parón de selecciones: ridículo del Barcelona

El conjunto blanco se marcha al descanso liguero en lo más alto tras la goleada sufrida por los de Flick en Sevilla

Alejandro Moreno Carrillo
Periodista
05 de Octubre de 2025 a las 18:23
Sevilla - Barça
Sevilla - Barça

El Real Madrid sonríe antes del parón de selecciones. La victoria frente al Villarreal (3-1) y el tropiezo del Barcelona en el Sánchez Pizjuán dejan a los de Xabi Alonso como líderes de LaLiga con 21 puntos. El Barça, por su parte, se queda con 19 y muchas dudas tras una tarde desastrosa en Sevilla.

El equipo de Hansi Flick se desplomó ante un Sevilla muy superior, que encontró espacios, velocidad y contundencia. El marcador final fue un 4-1 que incluso se quedó corto. Los locales pudieron marcar más si Isaac Romero hubiera estado más acertado en la primera mitad.

Baño del Sevilla desde el inicio

El conjunto andaluz salió con todo. En el minuto 13, Alexis Sánchez abrió el marcador tras una jugada colectiva de manual. Media hora más tarde, Isaac Romero amplió la ventaja con un disparo cruzado imposible para Szczęsny.

El Barça intentó reaccionar tarde. Rashford recortó distancias justo antes del descanso, en el 45+7’, con un gol que llegó fuera de tiempo añadido. Pero ni así cambió el rumbo. El Sevilla olió sangre y no perdonó.

En los últimos minutos, Carmona puso el 3-1 en el 90’ tras un gran contragolpe. Y en el 96’, Akor Adams remató la fiesta del Pizjuán con el cuarto. Un golpe duro para el Barça, que volvió a mostrar fragilidad defensiva, falta de intensidad y desconexión total entre líneas.

El Madrid, líder y en calma

Mientras tanto, en Valdebebas, calma total. El Real Madrid hizo los deberes ante el Villarreal con un gran Vinicius y un Mbappé decisivo. El 3-1 deja a los blancos líderes con 21 puntos, invictos y en un gran momento de forma antes del parón.

Las palabras de Vinícius tras su doblete ante el Villarreal.
Las palabras de Vinícius tras su doblete ante el Villarreal.

Xabi Alonso ha encontrado el equilibrio que buscaba: solidez, eficacia y un grupo que compite cada partido como una final. El contraste con el Barça es evidente.

El Real Madrid llega al parón con buenas sensaciones y una sonrisa amplia. El Barcelona, en cambio, lo hace con un cabreo monumental y muchas preguntas por responder.