El regreso del Barcelona al Camp Nou ha reactivado un debate que lleva años sobre la mesa: ¿debería el estadio llevar el nombre de Lionel Messi? La directiva azulgrana, esta vez de forma clara y directa, ha frenado la idea. Elena Fort, vicepresidenta del club, lo explicó sin rodeos. “Un homenaje, sí. Un cambio de nombre, no”, resumió.
La dirigente aseguró que el Barça mantiene una línea histórica muy definida respecto a sus instalaciones. No se personalizan con nombres propios. No ahora. No antes. No salvo contadas excepciones. Y Messi, por grande que sea su figura, no cambiará esa norma.
Fort lo dejó claro en una entrevista en la Cadena SER. “Intentamos no personificar los espacios. El único caso es el estadio Johan Cruyff. Incluso cuando se intentó poner el nombre de Gamper, la afición no lo aceptó. Hay muchas formas de homenajear sin renunciar a la identidad del club”, explicó.
El homenaje llegará, pero no en el nombre
El Barcelona sí trabaja en un reconocimiento especial para el argentino. Una estatua. Un gesto duradero. Algo que simbolice su legado sin modificar el nombre del templo azulgrana. “Messi tiene un vínculo muy fuerte con el club. La estatua está en los planes”, confirmó Fort.

La directiva quiere que ese homenaje sea consensuado con el jugador. Nada se hará sin su visto bueno. Y el club insiste en que la puerta está siempre abierta para futuras colaboraciones, actos o celebraciones con el ’10’.
Vuelta al Camp Nou con aforo limitado
Más allá del tema Messi, Fort detalló cómo será el regreso al estadio. El Barcelona volverá a jugar en el Camp Nou el 22 de noviembre, en un duelo ante el Athletic Club. Será un retorno deseado, pero con restricciones.
Hemos soñado con el regreso. Ahora lo vivimos.
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) November 17, 2025
Volvemos a casa. Volvemos al Spotify Camp Nou. 🏟️💙❤️ pic.twitter.com/2wQXnknQ8H
El aforo máximo será de 45.000 espectadores en esta primera fase. La obra sigue en marcha y el club debe cumplir con una larga lista de requisitos municipales. La vicepresidenta recordó que se trata de “la intervención civil privada más grande de Europa”. Un proyecto complejo, lleno de permisos, plazos y controles técnicos.
El Barça realizó una prueba con público el 7 de noviembre. Fue el paso final para recibir luz verde. Ahora, el estadio reabre. A medio gas. Pero reabre. Y el debate sobre Messi queda cerrado por la directiva: homenaje sí, renombrar el estadio no.