El pasado verano, el Real Madrid veía como Benzema se marchaba a Arabia Saudí, un golpe inesperado para el conjunto blanco que les obligó a moverse en el mercado. Surgieron varios nombres pero fue Ancelotti el que puso al equipo tras la pista de Harry Kane.
El británico era el que mejor encajaba en el perfil de Karim, por cualidades y por capacidad goleadora, sin embargo, todo se acabó torciendo y no llegó al Madrid, sino que recaló en el Bayern, por un motivo ahora revelado.
Es cierto que se habló del dinero que pedía el Tottenham, una cantidad demasiado elevada para un jugador de su edad que no es un proyecto a largo plazo, pero hay otro motivo que también hay que tener en cuenta, Harry Kane es gafe.
El delantero británico no ha conseguido ganar ni un solo título desde que es futbolista profesional. Con los Spurs nunca lo logró y se pensaba que este año en el conjunto muniqués iba a lograrlo, sin embargo ha seguido prolongando su mala racha.
Un año colectivo para olvidar
A nivel individual, Kane ha tenido un gran año. Pihchichi de la Bundesliga, disparado hacia la bota de oro y demostrando que es un gran goleador, pero a nivel colectivo va a terminar, otra vez más con una campaña en blanco.
Harry ha perdido muchas finales, ha quedado segundo en liga, pero nunca ha ganado nada. Esta temporada ha seguido ampliando sus registros. Perdieron la Supercopa ante el Leipzig, en Copa cayeron ante un tercera división y el Leverkusen ha roto su hegemonía en la Bundesliga.
En el Real Madrid respiran aliviados ya que, aunque pueda parecer una tontería, estas cosas preocupan en el mundo del fútbol. Y si no solo hay que ver lo que sucede cuando tocas el trofeo antes de tiempo.