Carlo Ancelotti ha dejado a muchos sorprendidos con sus decisiones tácticas durante toda la temporada, y parece que será igual en el encuentro contra el Bayern.
Con el equipo en pleno proceso de preparación, el entrenador italiano ha marcado territorio, definiendo a Camavinga como su pivote titular y a Tchouameni como el suplente.
Un nuevo rol para Tchouaméni
El joven centrocampista francés ha sido el foco de atención tras las palabras de Ancelotti. El técnico le ha comunicado que no será titular en el duelo contra el Bayern, pero su presencia en el terreno de juego está asegurada como primer cambio.
Esta decisión, aunque inicialmente sorpresiva, podría evidenciar una estrategia para potenciar la fuerza del equipo en momentos clave del partido.
El segundo central
Con la presencia indiscutible de Rüdiger como titular en la defensa, el principal dilema recae en la elección del acompañante del alemán.
Todo indica que Militao ocupará esa posición, respaldado por la confianza del entrenador. Camavinga, por su parte, se perfila como el mediocentro en este esquema táctico.
El papel de Tchouaméni como revulsivo subraya la importancia que Ancelotti otorga a la profundidad de su banquillo. Nacho por su parte no está previsto que juegue ningún minuto.
Con el desgaste físico y mental que conlleva un encuentro de esta magnitud, contar con jugadores frescos y de calidad para refrescar el juego puede ser la clave para inclinar la balanza a favor del Real Madrid.
La versatilidad del jugador francés, su poderío físico y su golpeo lo convierten en un recurso valioso para el equipo.
En un partido donde cada minuto cuenta, tener a un jugador como Tchouaméni en el banquillo puede significar la diferencia entre la victoria y la derrota.
Ancelotti, con su experiencia en encuentros de alta intensidad, parece tener claro su plan de juego y cómo sacar el máximo provecho de cada pieza en su equipo.