El Manchester City tiene un objetivo claro: Vinícius Júnior. Pep Guardiola quiere al brasileño para reforzar su ataque junto a Erling Haaland. El plan del club inglés es ambicioso: 150 millones de euros sobre la mesa para el verano de 2026.
La noticia ha hecho saltar las alarmas en el Bernabéu. Vinícius sigue siendo pieza clave del Real Madrid, pero su contrato expira en 2027 y las negociaciones de renovación no avanzan al ritmo esperado. Su entorno pide mejoras salariales y deportivas, mientras Florentino Pérez mantiene la firmeza de siempre: renovar, sí, pero sin comprometer la estabilidad del club.
El City y el ataque soñado
Guardiola tiene clara su estrategia. Rodrygo queda ‘aparcado’ por el momento; la prioridad es Vinícius. La idea del City es esperar, observar y lanzarse con todo en 2026. El brasileño encaja en su esquema por su velocidad, su regate eléctrico y su capacidad de romper defensas en un abrir y cerrar de ojos. Para el City, es la pieza que falta para completar un ataque de ensueño junto a Haaland.
En el Real Madrid, la situación se vive con cierta tensión. Nadie quiere perder a un jugador de la talla de Vinícius, pero la directiva sabe que hay límites. Casos recientes, como los de Ramos o Cristiano Ronaldo, enseñaron que el club siempre va por encima de cualquier individualidad. Xabi Alonso confía en Vinícius como pilar de su proyecto, pero la presión externa, sobre todo desde Inglaterra, empieza a notarse.
La afición, expectante
Los seguidores blancos observan cada movimiento con atención. Vinícius sigue marcando goles y generando jugadas decisivas, pero su futuro se debate entre la renovación y una posible salida millonaria. El interés del Manchester City añade un ingrediente más a esta historia, que promete ser uno de los culebrones del próximo verano.
Al final, todo dependerá de cómo se muevan las piezas: Vinícius, su entorno, el Madrid y el City. El fútbol europeo sigue atento, porque si la operación se concreta, hablamos de uno de los movimientos más importantes de los últimos años.