La información que llega desde Alemania no deja mucho lugar a dudas. Bild sostiene que el Real Madrid prepara la salida de Vinicius Júnior el próximo verano. El motivo: el episodio vivido en el último Clásico y la fractura que, según la crónica, se ha abierto entre jugador y cuerpo técnico.
En el Bernabéu, Xabi Alonso optó por sustituirlo en el minuto 72. La reacción del brasileño fue airada. Gestos, protestas y un ambiente tenso que encendió todas las alarmas dentro del club. Aquella tarde se rompió algo más que un simple cambio táctico.
Disculpas, pero sin vuelta atrás
Tras el partido, Vinicius tuvo que pedir perdón. Lo hizo en público y también en privado, delante de sus compañeros. Aun así, fuentes citadas por la prensa germana creen que el gesto no bastó. En la directiva hay cansancio acumulado por episodios anteriores. Y la paciencia se habría agotado.

La situación empeoró después. En el duelo contra el Valencia, el brasileño se ofreció a lanzar un penalti que iba a ejecutar Mbappé. Falló. Un error que, según la versión del técnico, dolió en el vestuario. Pequeñas fisuras que suman. Y que, sumadas, habrían llevado al club a tomar una decisión drástica.
Florentino y la regla del club por encima de todo
Florentino Pérez siempre ha defendido a sus estrellas. Pero la lealtad tiene límite. En el palco y en los despachos se habría impuesto la idea de que nadie está por encima de la entidad. Con Vinicius, dicen en las oficinas, se ha llegado a ese punto.
El jugador tiene contrato hasta 2027. Eso obliga al club a negociar con cautela. La intención, según la información, es conservar valor y salir con beneficios. En el mercado le asignan un valor cercano a los 150 millones de euros. Una cifra que convertiría la operación en una de las grandes ventas del verano.

De puertas afuera, la versión oficial permanecerá inalterada. Rotaciones y mensajes de normalidad. Por dentro, la decisión estaría tomada. Vinicius, cuyo futuro ha sido tema constante en los últimos meses, parece encaminado a poner fin a su etapa en Chamartín.
Queda tiempo hasta junio. Pero en el Bernabéu ya se preparan para un adiós anunciado. Y, al mismo tiempo, para cerrar la operación que ponga fin a una de las etapas más públicas y polémicas del club reciente.